Recuerdo cuando la navidad era el momento que más esperaba (aparte de mi cumpleaños). Estaba todo el año ansioso y deseando que llegara diciembre para recibir regalos, ropa nueva y ser feliz una vez más. Sí, era feliz y no lo sabía. Recuerdo que siempre quise uno de esos carros a control remoto, nunca lo recibí, pero seguía siendo feliz.

Hoy la navidad, para mí, es un poco distinta. La felicidad, ya no está, se ha ido, no sé a dónde, pero sé que se ha ido lejos. Desde hace unos tres años, siempre en diciembre, me invade una tristeza muy grande, sin razón aparente. Me siento vacío, incompleto, solo. Salgo con mis amigos y la pasamos bien, pero en medio de las reuniones y salidas, hay momentos en que me siento extremadamente solo, aunque esté rodeando de gente. Siento ganas de llorar, de gritar, pero sin poder hacerlo.

No sé la razón de mi tristeza, tampoco sé cuánto tiempo más pasaré así, solo sé que en diciembre, mi mejor amiga es la soledad.

Leave a Reply